“Prueba el auténtico, prueba el auténtico jugo”
Nada de alimentos procesados. Consume nutrientes reales de frutas y verduras.
Los alimentos procesados instantáneos parecen una salvación cuando andamos cortos de tiempo, ya que ofrecen una comida rápida y sencilla. Sin embargo, tras su practicidad, esconden peligros. Según un estudio del BMJ (British Medical Journal), los alimentos ultraprocesados como el jamón, las salchichas y las hamburguesas aumentan el riesgo de diversas enfermedades, como cardiopatías, cáncer y diabetes tipo 2, y se han relacionado directamente con diversos efectos adversos para la salud, como problemas de salud mental y muerte prematura. A pesar de la creciente preocupación por las consecuencias para la salud de los alimentos procesados, su practicidad y variedad los han convertido en una opción popular. Profundicemos en los peligros que se esconden tras estos alimentos aparentemente inofensivos.
Los “nutrientes reales” que se pueden obtener de alimentos naturales sin procesar se refieren a los nutrientes que se encuentran abundantemente en los ingredientes alimentarios obtenidos directamente de la naturaleza, como frutas, verduras, cereales integrales, frutos secos, semillas y legumbres.
Además de los macronutrientes esenciales como proteínas, grasas y carbohidratos que sustentan nuestro cuerpo, los "verdaderos nutrientes" que obtenemos de las frutas y verduras naturales incluyen vitaminas, minerales, fibra dietética y fitoquímicos esenciales (poderosos antioxidantes). Estos nutrientes genuinos ofrecen una gran cantidad de beneficios para la salud, como fortalecer el sistema inmunitario, prevenir enfermedades crónicas, mejorar la salud digestiva, mejorar la salud de la piel, aumentar los niveles de energía y promover el bienestar mental.
Los "nutrientes reales" se refieren a los nutrientes esenciales, naturales y beneficiosos para la salud que nuestro cuerpo necesita. Para mantener una dieta saludable, es fundamental priorizar los alimentos naturales ricos en estos nutrientes genuinos. Para asegurar una ingesta adecuada de estos nutrientes esenciales, considere implementar las siguientes prácticas desde hoy mismo.
- Coma frutas y verduras variadas. Intente consumir al menos cinco porciones de frutas y verduras de colores al día.
- Elija cereales integrales. Opte por arroz integral, avena, pan integral y otros cereales integrales en lugar de arroz blanco.
- Come frutos secos y semillas como refrigerio. Incorpora almendras, nueces, pipas de girasol, semillas de chía y otros frutos secos y semillas ricos en nutrientes a tus refrigerios.
- Incluye legumbres en tu dieta. Disfruta de lentejas, frijoles blancos, frijoles negros, garbanzos y otros tipos de frijoles.
- Reduce el consumo de alimentos procesados. Minimiza el consumo de alimentos procesados, como comida instantánea, comida rápida y carnes procesadas, y cocina más en casa.
- Bebe mucha agua. Mantente hidratado bebiendo al menos ocho vasos de agua al día.
Una ingesta variada de frutas y verduras es fundamental para una dieta saludable. La OMS recomienda consumir al menos 500 gramos al día. Para una opción rápida y nutritiva, los jugos son una excelente manera de incorporar estos nutrientes esenciales a tu rutina diaria.
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“Prueba el auténtico, prueba el auténtico jugo”
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